Última noche con Carlos
Es una noche de mayo y te lo encuentras en la tele;...
Ceniza y plors, gente buscando el abrazo, lamentos y parloteo incontrolado, todos erigidos en la mejor plañidera del portal. Basta ya, por dios. Si la imagen que precede...
Estaba anunciado que habíamos sido malos y que habíamos de pagarlo. Un lustro de Guardiola y dos de Messi nos pusieron al karma en contra y los desastres...
«Entre tanto llegó la primavera. Una primavera hermosa, definitiva, sin anticipos ni retrocesos, una de esas pocas primaveras que alegran a la vez a los hombres, a los...
Hubo un tiempo de derroche y belleza en que cada partido era una fiesta. El equipo jugaba, arrinconaba al rival y acribillaba su portería. Las goleadas se sucedían;...
¿Qué haría Johan?, se pregunta aún el mortal que más sabe de esto. Procedamos, pues. En primer lugar, sí, Johan habría pedido delanteros decisivos, con uno contra uno,...
El amable lector ha entrado a este mi agujero con la mueca furibunda del espectador que pide sangre en una pelea de simios. El entrañable lector hará una...
Qué intenso placer el de contemplar a nuestros demonios braceando en cubas de extremento líquido. Qué gozos, qué voluptuosa fantasía ver a los mariscales de Sauron arrastrarse, olvidada...
Un velocista sale disparado en plena avenida, gana impulso, desafía al viento, verdaderamente parece que va a volar -hasta el momento fatídico en que se rompe un tacón,...
«…Y esto sucederá así por los siglos de los siglos, mientras los niños sean alegres, inocentes y crueles». Peter Pan, J. M....
El amable lector ha entrado a este mi agujero con la mueca furibunda del espectador que pide sangre en una pelea...
Ceniza y plors, gente buscando el abrazo, lamentos y parloteo incontrolado, todos erigidos en la mejor plañidera del portal. Basta ya,...
Estaba anunciado que habíamos sido malos y que habíamos de pagarlo. Un lustro de Guardiola y dos de Messi nos pusieron...
«Entre tanto llegó la primavera. Una primavera hermosa, definitiva, sin anticipos ni retrocesos, una de esas pocas primaveras que alegran a...
Hubo un tiempo de derroche y belleza en que cada partido era una fiesta. El equipo jugaba, arrinconaba al rival y...
¿Qué haría Johan?, se pregunta aún el mortal que más sabe de esto. Procedamos, pues. En primer lugar, sí, Johan habría...
El amable lector ha entrado a este mi agujero con la mueca furibunda del espectador que pide sangre en una pelea...
Qué intenso placer el de contemplar a nuestros demonios braceando en cubas de extremento líquido. Qué gozos, qué voluptuosa fantasía ver...
Un velocista sale disparado en plena avenida, gana impulso, desafía al viento, verdaderamente parece que va a volar -hasta el momento...
Es una noche de mayo y te lo encuentras en la tele;...
“Tan perfecta es esta reproducción de un hombre cabal y normal que...
A lo largo de los años hay algunas cosas que hemos llegado...
Ceniza y plors, gente buscando el abrazo, lamentos y parloteo incontrolado, todos...
Estaba anunciado que habíamos sido malos y que habíamos de pagarlo. Un...
«Entre tanto llegó la primavera. Una primavera hermosa, definitiva, sin anticipos ni...
Hubo un tiempo de derroche y belleza en que cada partido era...
Firmo Albert Martín y nací en Barcelona en 1980. A los cuatro años hablaba de fútbol y estoy atado a las miserias de este equipo desde 1987; los insultos de mi padre y mi tío a once tíos de azulgrana que perdieron 1-2 ante el Sabadell me hicieron 'culer'. Recuerdo confusamente que un día llegó Cruyff y convirtió el suplicio en arte y aquel club oxidado en hoguera de vanidades. En plena pesadilla gaspartiana vi desde Lisboa un Madrid-Barça que La Banda ganó 2-0 con gol de Judas. Luego murió Kubala y comprendí que había llegado la hora de hacerme socio. Para entonces ya sólo podía ser periodista y me acogieron en 'El Mundo', donde publiqué 'El callejón del ocho'. Después me fui a 'Público'. Durante décadas, el Barça implicó lágrimas, culo prieto y miedo a cruzarse con un kiosco. Pero nos quedaba una profecía por cumplir y se sucedieron Ronaldinho, Xavi y Messi para aclarar que éramos 'foda'. Un día de invierno me encontré con que mi Caverna había sobrevivido a mi diario y perdí ciertas vergüenzas: no me importa ya reconocer que sueño fútbol casi todas las noches.
Postdata: Aún tiro caños y no olvido una cosa que escribió Hornby: "La única diferencia que hay entre ellos y yo estriba en que yo he invertido más horas, más años, más décadas que ellos, y por eso comprendo mejor qué sucedió aquella tarde".