Mercato

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  Falta uno: el bueno

  Medio año después de que el Barça se presentara por aquellos campos de Dios con Abde, Jutglà y Luuk de Jong en la delantera que ha alineado a los mejores futbolistas...

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  El verano de la 14

  Tremendo silencio y luto y autoflagelación el de la culerada ante ese nuevo horror parido en Mordor. Ha ocurrido: la increíble Champions ganada con un tiro a puerta en la final,...

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  Club Punt X

  En algún lugar de las desoladas llanuras occidentales de este nuestro Mordor existe un honrado municipio llamado Torrefarrera, conocido allende sus fronteras por un gigantesco local dedicado al comercio de carne...

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  Ajax, Cif y un estropajo

  «Que yo recordara, ese salón sólo se usaba en las grandes ocasiones. Ahora, el enorme televisor de mi padre estaba colocado en medio de la estancia, y había puesto enfrente dos...

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  Yo vi jugar a Garrincha

  El ruido se apagará, los modos se olvidarán, su padre pasará al cuarto oscuro de los sin nombre y la decepción se perderá. Cuanto todo se amortigüe, nos quedará ese rincón...

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  Se va

  Se va de uno siempre, de dos a menudo, de tres sin que sea excepcional, y de cuatro y de cinco cuando le da por ahí. El nivel de Neymar es...

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  Veinteañeros (III): Umtiti knows

  No le mientan. No piensen ni siquiera en ocultarle algo. No le cabreen y por supuesto no le miren a los ojos. Éstas son las nuevas normas in da haus. Más...

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  Veinteañeros (II): El del esparadrapo

  Caviar para frikis. El niño Digne, presunto sustituto de Alba, ha logrado antes de jugar sus primeros minutos reventar el grotescómetro del Camp Nou. Para algunos entusiastas, presentarnos en el Camp Nou...

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  Veinteañeros (I): El monaguillo

  Pocas veces nos concede el balón que el fútbol de un jugador se refleje con tanta precisión en su careto. Migueli, Vinnie Jones o Puyol alcanzaron ese raro nivel de fiabilidad que Denis Suárez, en el extremo opuesto,...

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  Objetivo Colotto

  Y para culminar una semana mágica de homenaje a los planificadores de este equipo, nos pasamos a la numerología. Tal vez este pesado ejercicio sirva para recordar a Tito y Zubi...